Tecnología

Foro de Arris en Miami reúne a la industria para debatir el futuro

28-06-2017
Con fuerte asistencia de cableoperadores y operadores de redes de telecomunicaciones de América Latina y el Caribe, se inició en Miami la nueva edición del Foro de Liderazgo Estratégico organizado por Arris en el hotel Ritz-Carlton de Coconut Grove.

Las sesiones comenzaron con una presentación de Germán Iaryczower, Senior VP de ventas para América Latina y el Caribe de Arris, quien señaló que el objetivos es 'compartir ideas' y describió los objetivos y alcances de la conferencia, que busca poner al alcance de la región los avances tecnológicos logrados por los ingenieros y técnicos de Arris a nivel mundial, en la denominada 'era de servicios Gigabit', con aumento significativo tanto de los índices de penetración de los servicios digitales entre la población de los distintos países de la región, como de la mayoría en términos de calidad del servicio, medida principalmente en ancho de banda disponible (1 Gbps como objetivo en este caso) para el usuario en una época caracterizada por el despliegue de múltiples dispositivos en cada hogar y fuera de éste: 'Si ustedes triunfan, nosotros restaremos triunfando', resumió.

A continuación el académico economista Sebastian Edwards habló acerca del futuro previsto en la materia para los diferentes países de la región, en vista de las cambiantes características y fenómenos que se están dando dentro y fuera de la misma. En tono 'cautelosamente optimista', Edwards señaló que América Latina experimentó un declive, desde su conquista por los europeos hasta fines del Siglo XX, y que, si se cumple con ciertos requisitos, se podrá revertir la situación.

Explicó este declive por tres factores: Políticas (se heredaron políticas muy centralistas de España); Instituciones (incluyendo corrupción) y Geografía, en este caso por la distancia a los mercados consumidores. Abogó por el fin de las medidas protectivas y el mejoramiento de las instituciones, comparando los casos de Chile, Costa Rica y Ecuador, que tenían situaciones económicas similares en 1990 y han evolucionado en forma diferente, con Costa Rica en 1.600 dólares como ingreso per capita, Ecuador en 1.100 y Chile en 2.400, en función de su gestión a partir de esa fecha.

Criticó la fijación de la moneda local al dólar, señalando que conducen a fuertes devaluaciones cuando baja el valor de las commodities exportadas, exhibiendo los casos de Argentina y México. 'Espero que hayamos aprendido estas lecciones, y ahora se están recuperando los precios de los productos básicos que exporta la región.

Entre los desafíos a enfrentar figuran la tecnología; elecciones en varios países; que las monedas locales tengan tipos de cambio flexibles frente al dólar; la necesidad de tener políticas fiscales anticíclicas; mejorar la desigualdad social, aumentando la movilidad en esa escala; aumentar el ahorro personal y aumentar la productividad, a través de la educación y también de la utilización de robots, lo cual afectará al nivel de ocupación. De acuerdo a McKinsey, la mitad de los empleos hoy existentes (el 75% en el caso de recolección de residuos) pueden ser reemplazados por la automatización o robots.

Para solucionar esto, hace falta dar las clases por Internet y realizar los ejercicios prácticos ("deberes") en clase: 'el futuro no es robots, es robots y gente, trabajando en conjunto y operando con algoritmos. Con el sistema actual de educación, América Latina no podrá competir'.

A futuro, ve crecimiento en la mayoría de los países con excepción de México, y ligeras devaluaciones en la mayoría excepto en Chile, donde espera una valorización del peso: 'El futuro está en nuestras manos; en las manos de ustedes, porque, para que haya crecimiento, es indispensable que mejore la tecnología'.

ELF 2017: Tecnología y Crecimiento
Hugo Ramos, Chief Technical Officer de Arris para América Latina y el Caribe, tuvo a su cargo la siguiente presentación, señalando que 'Arris está en el negocio de conectar gente' y señaló que el consumidor quiere 'más calidad, no sólo mayor velocidad de acceso; la latencia también le resulta importante' y simplicidad de conexión y, 'por supuesto, movilidad'. Pero, el crecimiento 'debe ser sustentable; en el mediano plazo habrá que ofrecer más servicios, y aparecerá el "asistente personal", más sencillo de utilizar que en la actualidad es Siri, por ejemplo; también estarán automatizadas muchas funciones del hogar, y habrá video en 8K, más avanzado que el 4K actualmente disponible; la Realidad Virtual se combinará con la Realidad Aumentada, las telecomunicaciones entre personas serán similares a los encuentros personales de esa gente, compartiendo el contexto; se impondrán las "celdas pequeñas" de telecomunicaciones inalámbricas, y el 5G'.

'Estamos preparados para la evolución, fallar no es una opción'
La sesión siguiente estuvo a cargo del futurista Volker Hirsch, quien comparó el auge de la información al inicial del petróleo, y destacó que la mayor fortuna fue obtenida por John D. Rockefeller, quien no fue dueño de pozos sino proveyó el transporte para el petróleo. Su argumento es que la cantidad de información, medida en Exabytes, crecerá exponencialmente, fuera de lo normalmente imaginable, lo cual requerirá una infraestructura actualmente desconocida: 'No sabemos cómo se almacenará, cómo se procesará, cómo se analizará'.

Una solución serían los robots, desde la manufactura y el almacenamiento a los robots para policía y seguridad y el análisis de los sentimientos en base a las expresiones faciales de las personas; también pueden ya construir casas y entregar pizzas a domicilio a través de drones y vehículos terrestres y la conducción de camiones de carga, reemplazando a lo que fue alguna vez el oficio con mayor cantidad de personal en los Estados Unidos. Todo esto reducirá empleos de humanos, para lo que Hirsch coincidió en recomendar la educación, que también podría estar a cargo de robots comunicándose entre sí para compartir lo que cada uno haya "aprendido": 'Todo lo que pueda ser conectado, será conectado. Lo importante es saber qué haremos con la información que será obtenida, y cómo estructurarla para que podamos aprovecharla mejor. El futuro se nos vendrá encima cada vez más rápidamente, podremos pedirle a las máquinas que resuelvan problemas que los humanos no podemos desentrañar, tendremos que saber que necesitaremos que hagan'.

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