Convenciones

Colombia: TV comunitaria pierde su feria en este 2015

14-09-2015
La Cooperativa Multiactiva de Televisión Comunitaria (ComuTV) confirmó la suspensión de la edición 2015 de la Expo ComuTV, que iba a tener lugar en Itagüí el próximo 21 y 22 de octubre.

Luego de siete ediciones, este espacio de encuentro para la TV comunitaria de Colombia, desaparecerá, en el marco de la situación crítica que el sector atraviesa desde hace varios años.

Sin duda la resolución 0433 de la Autoridad Nacional de Televisión (ANTV), impulsada por el ente que la precedió CNTV, aplicada desde 2013 imponiendo una serie de condiciones a los sistemas para poder mantener sus licencias, ha llevado a la desaparición de gran parte del mercado.

Más allá de la desaparición de unos cuantos de los más de 700 comunitarios que existían en el país, la gran mayoría optó por liquidar sus sistemas dentro de sus respectivas comunidades, para asociarse a modo de empresa y comenzar a ofrecer (con licencias propias, lo menos, o asociándose a alguno de los 18 nuevos licenciatarios, lo más) servicios de TV por suscripción comercial.

Frente a este panorama, ComuTV intentó en los últimos años reconvertirse en una feria de TV paga, convocando a los comunitarios que se mantienen firmes, pero sumándole a los pequeños y medianos operadores que surgieron a partir de la apertura del mercado de TV paga colombiano, además de operadores independientes de los demás países de la región Andina.

Sin embargo, en los últimos meses dos motivos, uno económico y otro de mercado, llevaron a la organización liderada por Sergio Restrepo a cancelar la edición 2015, quedando la incertidumbre para el 2016 y años subsiguientes.

Por el lado económico, un gran problema generó en la organización la devaluación del peso colombiano en relación al dólar, llegando la cotización a casi 3.000 pesos.

Y la noticia del acuerdo de Win Sports, canal privado que tiene los derechos de transmisión del fútbol colombiano, con los grandes operadores de TV paga, Claro, Movistar y Une-Tigo, fue un gran golpe para los comunitarios y los pequeños operadores privados, que hasta ahora tenían en sus grillas un diferencial que les permitía competir.

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